Enrique Galván Ochoa
El fondo de ahorro para el retiro de 39 millones de mexicanos suma un millón de millones de pesos. Debería ser una suma mayor, pero Fox le dio un par de tarascadas: sacó el dinero de las cuentas que no tenían movimiento. El 68% está invertido en valores gubernamentales –cetes, bonos del rescate bancario, etcétera. El resto ha ido gradualmente moviéndose a otro tipo de inversión, inclusive préstamos a empresas nacionales y extranjeras. Al principio no era así: más del 80% del capital ganaba intereses invertido en cetes y otros papeles que maneja el Banco de México. La garantía era el propio gobierno. Ahora Felipe Calderón se saca de la manga un proyecto para que se preste dinero a empresas constructoras que se dediquen a obras de infraestructura: carreteras, puentes, obras de drenaje. Hay un alto índice de quiebras en ese sector de negocios. Parece que en el futuro, el millón de millones de pesos, más lo que se llegue a acumular, terminará por esfumarse. O sea que los ancianos de los tiempos por venir tendrán que buscar chamba como cerillos de Wal-Mart para llenar la tripa con las propinas.
El Kid Lozano
Protagonista patético del primer gran escándalo de corrupción del gobierno de este sexenio –el del “coopela o cuello”–, Javier Lozano se ha convertido en el golpeador oficial. Lo mismo se pone los guantes contra el jefe de Gobierno del Distrito Federal, Marcelo Ebrard, cuando se ha tratado de obligarlo a tomarse la foto con su jefe, que se lanza a desmentir a Carlos Slim, en la ocasión en que anticipó la catástrofe económica que se avecinaba y que, al correr de las semanas, vimos que se quedó corto. Cuando Zhenli Ye Gon denunció que Lozano le dejó “encargados” más de 200 millones de dólares cash, cuyo destino era la campaña presidencial del PAN, hizo un viaje a Nueva York para contratar a una firma de abogados que demandaría al empresario chino-mexicano a fin de obligarlo a limpiar su nombre. Metió reversa. Seguramente le advirtieron que quedaría en situación precaria al ventilar en tribunales de Estados Unidos el manejo de los fondos de origen dudoso. En estos días Lozano anda jugando el papel de alquimista: quiere convertir a un sindicato independiente en sindicato charro, con la treta de desconocer a su dirigente, Martín Esparza. O sea: repite la fórmula “coopela o cuello”. Recientemente se apuntó un éxito con el sindicato del IMSS: compró al líder con una diputación federal del PAN. ¿Por qué no intenta lo mismo con Esparza? Si dice que sí, ahí se acabó el problema, pero si resiste la tentación, la torpeza de Lozano habrá añadido un problema a Felipe Calderón por lo que resta del sexenio. Lo bueno es que no tiene ninguno.
Pantalonera
A reserva de volver a tocar el tema en los siguientes días, con más espacio y tiempo, les anticipo que la Suprema Corte de Justicia dio palo a la demanda de amparo de la desmedida señora Marta en el litigio que, según Vicente Fox, tuvo los pantalones de promover contra la revista Proceso.
e@Vox Populi
Asunto: el uranio, acuerdo secreto
Quisiera que me pudieran informar qué pasó con el uranio mexicano que tantos millones de pesos costó localizar y comenzar a extraer por aquella entidad encargada del asunto, Uramex, cuyo director fue el doctor Francisco Vizcaíno Murray. Nos sería muy útil para generar energía, ahora que se acaba el petróleo.
José Espinoza/Distrito Federal
R: Uramex fue liquidado por aparentes conflictos políticos y laborales en 1985, eran los tiempos de Mike el rajón, y sus funciones se pasaron a otras dependencias. El país enfrentaba –para variar– una terrible crisis que lo condujo a suspender el pago de la deuda externa. En aquellos días se comentó que el apoyo que el gobierno mexicano recibió de Washington en la renegociación de la deuda, entre otras condiciones secretas, incluía abandonar el proyecto del uranio. Te invito a que hagamos juntos una investigación en IFAI.
Asunto: otra de Mexicana de Aviación
¿Qué hacer Enrique? Te cuento: el pasado 30 de septiembre compré dos boletos redondos en la ruta Oaxaca-México-Oaxaca de Mexicana de Aviación, uno era para mi madre y otro para mí. Sucede que la noche del 29, mi madre sufrió un ictus cerebral y por supuesto no pudo viajar –tiene 94 años. Desde entonces y comprobando circunstancias, solicité el rembolso o el cambio de boleto a mi nombre, me dicen que por el sistema o por la política de la compañía o portafolio o bla, bla, sólo me pueden dar otro boleto para mi madre, eso sí sin cargos. Es aberrante y abusivo, ¿no crees? Por todos lados hay palos.
Femaria Abad/Distrito Federal
R: Necesitas leer la letra chiquita del boleto o la factura. Algunos boletos no son rembolsables. De cualquier modo estoy enviando tu queja a Profeco. No es probable que te devuevan el dinero, las grandes empresas tienen abogados permanentemente en Profeco defendiendo sus intereses, lo malo es que los consumidores no tenemos a nadie que dé la cara por nosotros.
Asunto: las cajas de ahorro
Deseo hacer una consulta respecto a las cajas de ahorro que funcionan en el estado de Oaxaca y que ponen en riesgo el patrimonio de miles de familias pobres: Financiera Coofia, Caja Raza Unidad de Oaxaca, Alianza Cooperativista Nacional y Banco de Ahorro y Servicios Financieros de Oaxaca. ¿Se encuentran o no reguladas por las instituciones gubernamentales? ¿Deben intervenir las autoridades municipales de Oaxaca? La mayoría se rigen por el sistema de usos y costumbres.
Miguel López/Oaxaca
R: La primera de tu lista, Coofía, enfrenta graves dificultades financieras, posiblemente en estos momentos ya habrá cerrado algunas de sus oficinas. Respecto de las demás, deberías consultar a la autoridad competente (es un decir), la Comisión Nacional Bancaria. Al menos para que compruebes que es una nulidad.
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