Ayer renunció Arely Gómez González a la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos Electorales. Y deje usted que sólo faltan tres días para las elecciones; ignore que sean los procesos más amenazados de la historia reciente. El tema es que dos grupos políticos están en confrontación, y según ellos mismos, ambos recurrirán a prácticas que se suponían desterradas para ganar, y quien las juzgaba era justamente la Fepade. Arely Gómez se sentía presionada desde el gobierno federal, nos dice una fuente cercana. Sugiere en su carta de renuncia dejar su lugar a alguien que “responda a parámetros que desea el gobierno” del grupo que la presiona. El dato es muy preocupante por sí solo; y si se le suma que ayer se nombró a Mony De Swaan Addati como nuevo titular de la Cofetel, es para alarmarse. El nuevo árbitro de las telecomunicaciones es un incondicional de Juan Molinar Horcasitas, quien a su vez pertenece al círculo íntimo de Los Pinos. De Swaan es un desconocido en el sector, no garantiza imparcialidad, pero sí cumple con el compadrazgo que reclama esta administración. Fue director regional en Pfizer México y Centroamérica, sector donde estuvo Molinar (fue titular del IMSS). Después, el mismo Molinar lo integró a la nómina federal como asesor y titular de sus áreas: el Seguro Social y la SCT. Cuidado: Las señales advierten que el gobierno federal ya metió la mano en dos fiscalías clave. Y cuidado, que para garantizar que el Estado falle, basta derrumbar las instituciones. Una por una.
Tal cual lo sabíamos: Javier El Vasco Aguirre se va. Deja detrás una Selección Nacional medianita (como era, de acuerdo con las estadísticas históricas), millones de aficionados defraudados, y un país que le dio, en 13 meses, 25.49 millones de pesos al tipo de cambio de ayer. Ganaba más que los técnicos de Sudáfrica o Brasil. Más que Diego Armando Maradona. Y se va, tal cual lo anunció a la Cadena SER de España en febrero pasado, para sacar a su familia de este México “jodido” e inseguro (en sus propias palabras). Regresará a Europa. Por cierto, El Vasco Aguirre llegó a la Selección, suele decirse en los más altos círculos del futbol mexicano, por el presidente Felipe Calderón. Su amigo, dicen, le pidió que dirigiera el equipo y aunque “él no quería —así se cita—, le entró”. Día curioso el de ayer; Aguirre y Calderón hablaron de su retiro. El primero para asumir su culpa por la derrota, y el segundo para advertir a los empresarios que “yo dentro de poco ya no voy a estar y la situación [la violencia] va a seguir”, según la reseña que hicieron los dirigentes del empresariado después de estar con él en Los Pinos.
Apunte final: Circulan ya las fotos de Rodolfo Torre Cantú minutos después del atentado. La primera impresión es que no le dispararon ráfagas a ver si le daban; sugieren que a todos los bajaron de los autos y los ejecutaron.
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