No eran más de 100 los asistentes a la demostración en solidaridad con la #acampadaSol y #spanishrevolution en México. Pero como bien dice el dicho, eran pocos pero bien locos.
Entre consignas en repudio a los partidos españoles mayoritarios (PSOE y PP) los asistentes, en su mayoría españoles, manifestaban su solidaridad con la Protesta de los Indignados. Mientras tanto, la pregunta entre el 15 o 20 por ciento de asistentes de nacionalidad mexicana que se encontraba en el lugar era: “¿y la #mexicanrevolution, cuando?” (pero bueno, creo que el “estamos hasta la madre” surgió un poco antes).
Mientras tomaba notas para lo que fue un reporte que escribí para SDPNoticias.com, no pude dejar de pensar el grave error que cometían algunos manifestantes, entusiastas pero mal encauzados, de ir tras el espejismo del abstencionismo. Como se ha demostrado una y otra vez en México y en muchos otros países del mundo, a los parásitos detestables conocidos como “políticos profesionales” les vale un pito el “contundente mensaje” de “rechazo” que implica no votar por ellos. En principio porque aunque sea una persona la que vote con ellos es suficiente. En segundo porque su porcentaje de aprobación no impacta en nada sus enormes sueldos y desmedidos privilegios.
Cuando estaba a punto de retirarme, algo me hizo ver estos actos con algo de optimismo. Entre un grupo de los asistentes comenzó a escucharse el lema de que “la democracia no funciona sin votos”, lo cual es enteramente cierto, ya que los votos son la única manera viable de sacar a esos hijos de puta de los lugares en donde se encuentran, sin merecerlo.
Ya veremos qué pasa el próximo 28 de mayo, fecha en que se tiene planeada otra manifestación.
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