Se acercan los comicios federales de 2012. El Jefe de Gobierno del Distrito Federal, Marcelo Ebrard, y su antecesor, Andrés Manuel López Obrador, buscan la candidatura de la coalición de los partidos progresistas mexicanos, el PRD, el PT y Convergencia, para buscar la Presidencia de la República. Ambos aseguran que sólo habrá un candidato de izquierda. Y han determinado que la candidatura la obtendrá el mejor posicionado en las encuestas, lo que representa un problema a causa de la falta de credibilidad que tienen éstas entre muchos ciudadanos.
Sin embargo, tomando en serio las encuestas, si mañana se tomase la decisión de elegir al candidato de izquierda para la Presidencia por medio de los resultados que han arrojado la mayoría de éstas últimamente, López Obrador quedaría electo. En la que presentó El Universal, AMLO aventaja por un punto a Ebrard entre los ciudadanos en general; no obstante, Consulta Mitofsky muestra una ventaja del tabasqueño sobre el mandatario capitalino de 68 a 27 entre los perredistas; es decir: una ventaja abismal. En la del Universal, en esta misma categoría, la diferencia es de 2 a 1, también, a favor de Andrés Manuel.
A resultas de lo anteriormente expuesto, creo que es de suma importancia que se establezca qué opinión se tomará en cuenta para elegir al candidato presidencial de izquierda: si la de los ciudadanos en general, o si la de los perredistas, petistas y convergencionistas. En mi opinión, deben ser los militantes de los tres partidos previamente enlistados quienes hagan esta elección. Y creo que así será, ya que considero ilógico que panistas y priistas tengan que ver en la decisión en cuestión. Consecuentemente, pienso que a Marcelo Ebrard le será muy complicado obtener la candidatura para buscar llegar a Los Pinos en 2012.
Tomando en cuenta lo mencionado, y que el mismo día en que se elija al próximo presidente de la República, se elegirá al sucesor de Marcelo Ebrard, se puede deducir que aparte del deseo de este último de ser el siguiente titular del Poder Ejecutivo, existe también su anhelo de que el próximo Jefe de Gobierno del Distrito Federal sea alguien de su confianza, alguno de sus "alfiles"; me viene a la mente Mario Delgado, Secretario de Educación del Distrito Federal, hombre sumamente preparado, y capaz de gobernar de manera virtuosa la capital; pero que, desafortunadamente para él, se encuentra muy abajo en las encuestas, sobre todo debajo de lopezobradoristas como el senador Monreal o el Secretario de Desarrollo Social, Martí Batres. No obstante, un pacto podría cambiar esto.
¿De qué tipo de pacto estoy hablando? Me refiero a un posible pacto entre Andrés Manuel y Marcelo. Por ejemplo: el tabasqueño puede hablar con Batres, Monreal y Alejandra Barrales para que declinan a favor del "gallo" de Ebrard. Esto a cambio de que este último lo haga a favor de aquél para obtener la candidatura presidencial. Y así lopezobradoristas buscarían la Presidencia de la República con el apoyo de la gente de Marcelo Ebrard, y ésta iría por el Gobierno del Distrito Federal con el apoyo de Morena, movimiento que encabeza AMLO.
Con esto Ebrard mantendría fuerza política como, quizás, senador, y se perfilaría con una importante ventaja rumbo a la elección presidencial de 2018, con importantes posibilidades de ganarla. Pero creo que si sigue obstinado en ser candidato del PRD para los próximos comicios federales de 2012, dejará solo a su "gallo" en la carrera rumbo a la jefatura del DF; perderán él y su gente el gobierno capitalino contra los lopezobradoristas; no logrará ganarle la candidatura a Andrés Manuel López Obrador; y quedará completamente debilitado y fuera de los importantes escenarios políticos en un futuro.
Ojalá que "el carnal" no se equivoque; porque creo que en 2018 podría ganar la Presidencia, y que sería un muy buen presidente; además, pienso que su candidato, Mario Delgado, sería un excelente jefe de gobierno. De verdad espero que a Marcelo no se lo coma su propia ambición. Porque el actual mandatario del DF promete, pero no para el 2012. Lo considero un muy buen político, con virtudes y futuro. Y si él y López Obrador unen fuerzas, pueden más que todos. Así, juntos, ganaron, y ganaron bien, en 2006 la Presidencia y el Distrito Federal.
No hay comentarios:
Publicar un comentario