Que a pesar de ser una población más grande que hace seis años, y a una semana del cierre de registro, la participación de mexicanos residentes en el extranjero en los comicios de este año será considerablemente menor que en 2006.
El número de inscritos para votar fuera de México tiene una caída dramática: van 22 mil, frente a 42 mil en 2006.
Malas noticias para el IFE.
Que Enrique Peña Nieto comió con los 20 empresarios más importantes de Chihuahua, entre ellos Federico Terrazas, de Cementos Chihuahua; Eloy Vallina de Grupo Accel, y los gaseros Eugenio Baeza, Tomás y Enrique Zaragoza.
Por cierto, Peña Nieto llegó con puntualidad inglesa a los actos en la entidad. Y dicen en su equipo que así será de aquí en adelante: ni un tache más por retraso.
Que en cambio, el que tiene serios problemas de logística es Ernesto Cordero, quien sigue llegando tarde a sus actos con la militancia panista.
Fue tal el retraso ayer en Cholula que algunos asistentes terminaron vitoreando a Josefina Vázquez Mota.
¿Aplicará también desde hoy la nueva regla inglesa de Peña Nieto?
Que hablando de Coahuila, el presidente Calderón dijo que trabajará “codo con codo” en materia de seguridad con el gobernador, Rubén Moreira, quien le entregó un acuerdo del Congreso del estado solicitando ayuda para enfrentar a la criminalidad.
Como se dice: una cosa es una cosa y otra cosa es otra. Una es el gobernador Rubén y otra el “hermano desaparecido” Humberto.
Que entre las corrientes del PRD en el DF hay preocupación y molestia porque, dicen, Manuel Camacho Solís ya le quitó el control del proceso interno a Marcelo Ebrard.
Se quejan de que desde el DIA, Camacho abre o cierra puertas a aspirantes a diputados, senadores o jefes delegacionales, y que de plano quiere aparecer como el fiel de la balanza en la definición del candidato o candidata de las izquierdas a la Jefatura de Gobierno del DF.
¿En serio?
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