En la entrevista que sostuvo Enrique Peña Nieto con la periodista Carmen Aristegui el viernes pasado, dijo “desconocer” la denuncia presentada contra Felipe Calderón por un grupo de mexicanos ante la Corte Penal Internacional de la Haya, por delitos de lesa humanidad en virtud de los más de 50 mil muertos y la constante violación a los derechos humanos que provocó la lucha emprendida por Calderón contra el crimen organizado.
Sin embargo, Peña Nieto consideró que esa demanda NO TIENE SUSTENTO ya que no ha habido ninguna acción del Estado para generar el número de muertes, y que evidentemente no fue esa la intención del presidente.
Unas horas más tarde, en su encuentro con estudiantes de la Universidad Iberoamericana, Peña Nieto expresó que asumía su responsabilidad por los hechos ocurridos en Atenco en 2006 ya que su intención fue recuperar el orden y la paz en esa entidad. Esa declaración desafortunada fue sin duda la que potencializó el rechazo de los estudiantes a su persona y a su postura frente a los abusos de poder cometidos contra el pueblo, especialmente contra estudiantes, luchadores sociales, defensores de la tierra, de los derechos humanos así como contra periodistas.
Las muertes de la guerra de Calderón y los abusos cometidos en Atenco, según Peña Nieto, fueron sin querer.
¿También la matanza estudiantil del 68 fue sin querer y para mantener el orden?
Se equivoca Peña Nieto si piensa que con esos argumentos va a convencer a la sociedad mexicana, que ha sufrido en carne propia los abusos del poder.
En muchas ocasiones hemos visto a Peña Nieto apoyar y hasta felicitar a Felipe Calderón por la valentía de emprender una guerra que nadie pidió y que sólo ha servido para generar más violencia y permitir la injerencia de Estados Unidos en asuntos de seguridad nacional que sólo competen al Estado mexicano.
¿Cuál es entonces el cambio que promete el candidato del "nuevo" PRI?
Si hay algo que preocupa a los mexicanos en estos momentos es la violencia, la inseguridad y las injusticias cometidas contra ciudadanos inocentes. Si hay algo que lastima es la burla de los encargados de proporcionar seguridad y bienestar al pueblo. Si hay algo que hiere es la impunidad de políticos y funcionarios que desde el poder se han hecho inmensamente ricos y que no son tocados ni con el pétalo de una crítica por los medios masivos de comunicación.
Siento que lo ocurrido en la Ibero, y después en Saltillo donde simpatizantes priístas agredieron a ciudadanos que expresaban con mantas su rechazo a Peña Nieto, constituye la pequeña gota que puede derramar el vaso.
Por lo pronto ya están programados 15 mítines contra Enrique Peña Nieto para el día 19 de este mes, en los que se pide no pronunciarse por ningún otro candidato sino concretarse en rechazar a Enrique Peña Nieto y al grupo que representa.
12:00 am – Parque Alameda, Torreon, Coahuila.
Evento en Guadalajara, Jalisco. (hora y sitio por confirmar)
11:00 – Catedral de Tepic, Nayarit.
13:00 hrs – Palacio Municipal de Tijuana, Baja California.
12:00 am – Parque Las Palapas, Cancún, Quintana Roo.
11:00 am – El Palomar, Chihuahua, Chihuahua.
13:00 hrs – Plaza de la Revolución – Villahermosa, Tabasco.
12:00 am – Plaza 28 de julio, Playa del Carmen, Quintana Roo.
12:00 am – Colegio Civil Centro Cultural Universitario, Monterrey, Nuevo León.
12:00 am – Plaza las Armas, Querétaro, Querétaro.
12:00 am – Zócalo del Puerto de Veracruz, Veracruz.
12:00 am – Prolongación Calzada del Arco y Puente del Amor, León, Guanajuato.
12:00 am – Plaza Melchor Ocampo, Morelia, Michoacán.
12:00 am – Plaza Lerdo en el centro de la ciudad de Xalapa, Veracruz.
10:00 am – Plaza Cívica de la Patria, Ensenada, Baja California.
Y en el Zócalo de la Ciudad de México a las 12:00 am habrá también un mitin pero de apoyo al candidato de las fuerzas progresistas, Andrés Manuel López Obrador.
Por mi parte los invito a mi arranque de campaña como diputada local del Distrito XXV del D.F. por los partidos PT, MC, PRD y MORENA.
Lunes 14 a las 12:00 am en Centenario y Margaritas, Colonia Prados Providencia, Delegación Álvaro Obregón, Ciudad de México.
El cambio verdadero está por llegar.
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