Tomando café leo a uno de los columnistas de Excélsior, Francisco Garfias: “Al PRD y al obradorista Federico Arreola los hacen responsables de las zarandeadas que le han puesto a la candidata del PAN en Twitter y Facebook”.
¿El PRD y yo responsables?
Garfias, antes de escribir lo anterior, contaba en su columna el lío del espionaje telefónico en contra de Josefina Vázquez Mota y de su coordinador de redes sociales, Agustín Torres.
El columnista explicaba que en la casa de campaña de la candidata presidencial del PAN decidieron presentar una denuncia por la grabación ilegal de la llamada entre Vázquez Mota y Torres: “No se sabe por qué, pero mezclaron al PRI y al PRD, a pesar del contenido de la grabación”.
El hecho es que, según supo Garfias, en el cuartel general de Josefina “se dicen convencidos de que hay una ‘campaña negra’ en contra de Josefina que es impulsada por los adversarios externos de la candidata azul. ‘No pasa un día sin que aparezca algo negativo en las redes sociales’, se quejan”.
Y después, frente a Pancho Garfias, los panistas culparon al PRD y a mí.
Por el PRD no voy a hablar. Pero, por lo que a mí respecta, voy a pedir seriedad a los asesores de Josefina Vázquez Mota y a esta señora que, se supone, es una política experimentada.
¿Cuáles han sido las crisis de Josefina en las redes sociales de internet?
1.- La del Estadio Azul que se vació cuando la candidata del PAN empezaba a hablar. ¿Yo lo vacié? No, desde luego. De hecho, comenté el incidente después de haber leído numerosos comentarios en Twitter que surgieron por una nota publicada en www.reforma.com y por las imágenes transmitidas por Milenio TV.
2.- La de que Josefina admira a Pinochet. Eso lo escribió ella, porque quiso, en un artículo que hace años le publicó El Economista. ¿Le dicté el texto? No, desde luego. ¿Saqué de las hemerotecas ese artículo? No. De pronto, vi en Twitter que hablaban del tema y me sumé a la charla.
3.- La de que la señora Vázquez Mota, en su tesis de la Ibero, criticó fuertemente a la UNAM. ¿Le dije, hace más de 20 años, que hiciera eso? No, por supuesto. Josefina piensa que ahora considera que la UNAM es una muy buena universidad. Pero antes la detestaba. Es su problema.
4.- La de que Josefina, en el ITAM, habló mal de la Ibero. ¿Le exigí que lo hiciera? Ni hablo con ella. Les juro que hace más de seis años no veo a la señora Vázquez Mota. Si ella quiso burlarse de su alma mater, muy su derecho. A mí que no me inventen cosas.
5.- La del espionaje ilegal cuando Josefina Vázquez Mota hablaba con Agustín Torres. Yo no grabé la llamada. De hecho, cuando la conocí el tema ya era TT porque Carmen Aristegui le preguntó, en su programa de radio, a la señora del PAN.
Entiendo que Josefina esté desesperada. Las cosas le están saliendo mal y, ni hablar, se cayó el teatrito que ella y Felipe Calderón quisieron montar con la obra de que la panista ya estaba a cuatro puntos de distancia del priista Enrique Peña Nieto.
No hay tal. Ella, según Covarrubias y Asociados, está a 19 puntos de Peña Nieto empatada estadísticamente en el segundo lugar con Andrés Manuel López Obrador.
No está todavía derrotada la panista (ni lo está el izquierdista). Pero si quiere ganar tendrá que calmarse y, después, realizar el diagnóstico correcto de la situación.
No le ayuda a Vázquez Mota y a sus colaboradores culparme a mí de sus propias metidas de pata
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