Julio Hernández López
POSES. Los mandatarios que asisten a la cumbre de Cancún se tomaron la fotografía oficial en la playa ubicada junto al hotel en el que se hospedan. El primer día de trabajos estuvo marcado por un enfrentamiento que protagonizaron Hugo Chávez y Álvaro UribeFoto José Carlo González Felipe Calderón se suma, en una extraña alianza provisional, a la corriente nacionalista de izquierda que domina el escenario gubernamental latinoamericano y que promueve una nueva organización de defensa de sus intereses, sin la participación de Estados Unidos ni Canadá (adiós a la OEA), mientras en el Distrito Federal un video difundido por las autoridades policiacas locales muestra a un narcotraficante detenido que narra la manera en que el cuasilicenciado Joaquín Guzmán Loera ejerce el poder en el territorio bajo su mando y establece ciertas reglas mínimas de convivencia que contrastan con el sangriento desorden nacional.
Fundido farol anfitrión de Latinoamérica e inepta oscuridad de su casa, Felipe discursea y filosofa en Cancún mientras en Sinaloa el intocado Chapo ordena a su equipo de gobierno, según la confesión del aprehendido José Vázquez, que en su reino esté “todo en paz; que se portara uno bien, que en esa área no se permitía que nadie cobrara plaza, ni secuestrara, ni robara ni asaltara, que a la gente que hiciera eso había que sacarla del área”.
Programa mínimo de gobierno, plan regional de desarrollo: “pues toda el área que es del norte (del país) le rinde al Chapo... (él) es el quien quiere que esté todo tranquilo, controlado, todo se le rinde a ese señor”, dice el detenido Vázquez, y Ramón Eduardo Pequeño, jefe de una sección de la Policía Federal, da a conocer esas declaraciones, que curiosamente se producen y difunden cuando están en el país los presidentes y dirigentes de Latinoamérica. Mismo funcionario Pequeño que impactó la visita de Barack Obama a México con aquella denuncia efectista, luego virtualmente abandonada, de que un narcotraficante estaba preparando un atentado contra Calderón. ¿Quién manda en México?, podrían preguntarse los mandatarios extranjeros, sin meterse en enredos electorales marca 0.56 por ciento. La respuesta ofrecida por las propias oficinas calderónicas podría estar en un video confesional.
Astillas
En el PAN se asustan con el fantasma de Maquío, cuyo hijo trae en jaque al calderonismo nomás con unas declaraciones sobre la notable selectividad de la “guerra” contra ciertos cárteles del narco; en el PRI reaparece el gran cacique Figueroa a través de su júnior, que propone para candidato a gobernador a su tradicional ayudante, Héctor Vicario, y en la “izquierda” se asoma al foro Ruth Zavaleta para invitar a Cuauhtémoc Cárdenas a que se sume al nuevo negocio de explotación electoral que bajo el rubro de Régimen de Pequeños Partidos pretende abrir la ex perredista... Elbonso Lujambio niega terminantemente que el SNTE esté supeditado a la SEP. No. Al revés. Niega que la SEP esté supeditada a la Educación Pública. No. Ni niega ni afirma ni todo lo contrario. Mejor se la hace de pleito diplomático tramposo al relator de la ONU, no por el contenido de su informe crítico sobre la situación educativa mexicana, sino por no haberle informado previamente de lo que soberanamente iba a anunciar el mencionado relator. En todo caso, Elbonso opta por tocar el tambor, en una ceremonia de abanderamientos, para demostrar a Los Pinos que él está preparado (la caballada, con él, estaría Gordilla) para continuar con la Banda de Guerra... La vertiente ideológica Coopelas o Cuello explora las condiciones para reprimir a dirigentes del Sindicato Mexicano de Electricistas, tal como ya lo ha anunciado el secretario del garrote laboral, Javier Lozano. Por lo pronto, Domingo Aguilar Vázquez, subsecretario general de la división Nuevo Necaxa del citado sindicato, fue detenido el domingo pasado por el presunto robo de recibos de pago de energía eléctrica. Liberado mediante el pago de fianza, su expediente es un adelanto de lo que en la desesperación es capaz de hacer la administración federal: invención de delitos, órdenes de aprehensión y cacería de dirigentes: felipismo sin luz política pero con uso selectivo de la fuerza... A Manuel Bartlett se le ha levantado el sistema. Cuando menos en lo judicial, pues la Suprema Corte ha abierto la puerta para que Germán Martínez Cázares, quien fue presidente nacional del PAN, diputado federal y derrotado estratega electoral, pueda ser castigado por haber dicho que el ex secretario de Gobernación había sido cómplice del asesinato del periodista Manuel Buendía y culpable de un fraude electoral (lo que ha de ser absolutamente falso, si se toma en cuenta que ahora pelea al lado de los presuntos defraudados; igual absolución política podrá recibir Chente Fox ahora que haga campaña en Hidalgo con Xóchitl bajo la bandera perredista en alianza)... El demagogo administrador priísta de Chihuahua, José Reyes Baeza, ha creído que con propaganda y discursos puede reducir la cuota de responsabilidad que le asiste por la tragedia juarense. Ya antes hizo una visita relámpago a Villas de Salvárcar (las mentadas de madre recibidas no salieron al aire en los amables noticieros electrónicos) y ayer quiso continuar con su agenda de osadías al asistir a un centro escolar donde estudiaban tres de los asesinados y donde un joven le reprochó abiertamente: “¿Por qué tuvo que haber una matanza de estudiantes para que usted se ocupara de Ciudad Juárez?”... Las declaraciones de güeva de Chente Fox permitieron asomarse críticamente a personajes que en otras circunstancias difícilmente podrían tocar esos temas sin ellos mismos quemarse: Peña Nieto pidió al esposo de la señora Marta que evalúe lo que en materia de lucha contra el narcotráfico “dejó de hacer” durante su sexenio. El derrochador del erario en propaganda futurista se puso profundo al decir que la penetración social del narco se debe a la “falta de crecimiento en la economía del país, que imposibilita el desarrollo individual de los mexicanos y la población en su conjunto”. El gobernador de Hidalgo, Miguel Osorio Chong, pidió al embotado ex presidente que deje “de decir sandeces”... Y, mientras los legionarios ofrecen disculpas antes de la sentencia vaticana, ¡hasta mañana, en esta columna de velas empujadas por el dios del viento!
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