Mario López Valdez, Malova, gobernador electo de Sinaloa, tiene guardada una sorpresa. Admite su pasado priísta; dice que no esconde a sus amigos, pero deja abierta la posibilidad de cobrar un par de facturas. Después de firmar los 12 compromisos de buen gobierno, el sinaloense fue abordado por un periodista que le preguntó: ¿En serio no se la va a cobrar a los priístas, no les va a revisar sus cuentas, no va a haber nadie en la cárcel? Respondió con una sonrisa: “Eso no se platica, simplemente se hace”.
Para algunos, el nombramiento de José Luis Vargas Valdez como titular de la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos Electorales (Fepade) no representa una recompensa al esfuerzo de un funcionario de bajo perfil o simplemente que el grupo en el poder se ha quedado sin fichas para cubrir los puestos vacantes, sino que “despierta suspicacias por su pasado en el Cisen”. El vocero de la bancada del PRI en la Cámara Alta, Carlos Jiménez Macías, dijo que aunque se trata de una atribución del Ejecutivo, el Congreso debe discutir esta designación, ya que se trata de una dependencia importante y el perfil requiere a alguien “menos comprometido”. Esto apenas comienza.
Ahora que está de moda pegarle a todo lo que huela a la Comisión Federal de Telecomunicaciones (Cofetel) y a su presidente, Mony de Swaan, el senador del PRD Carlos Sotelo presentó una excitativa, es decir, un llamado oficial a las comisiones para que trabajen y dictaminen una reforma de su autoría para crear el Instituto Federal de Telecomunicaciones y Radiodifusión, el cual sustituiría a la comisión. Así, mientras el PRI analiza impugnar el nombramiento de Mony de Swaan, y el titular de la SCT, Juan Molinar Horcasitas, tendrá que comparecer para explicar la designación, Sotelo plantea desde el 8 de septiembre de 2009 que la nueva Cofetel sea un órgano con personalidad jurídica propia e independiente del poder público. Pone el ojo en dos asuntos: la creación del Organismo Promotor de Medios Audiovisuales y la designación de Mony de Swaan, quien —denunció— debió ser nombrado por cuatro años y no por ocho, como sucedió. Esto, desde su punto de vista, demuestra “la intención de controlar y maniatar a los medios y convertirlos en simples extensiones de la comunicación social de la Presidencia”. Veremos.
Apunte final: Algunos senadores han puesto el grito en el cielo por el anuncio que se dio en torno al Canal 11. La senadora perredista Claudia Corichi, hija de Amalia García, gobernadora de Zacatecas, calificó de “aberrante y lamentable error” que la Secretaría de Gobernación haya “expropiado” el emblemático canal del Instituto Politécnico Nacional al vincularlo con el Organismo Promotor de Medios Audiovisuales, descentralizado de la Segob. Advirtió que si hay injerencia política con miras a 2012 se cometería un grave error, pues regresaríamos a las épocas de restricción y manipuleo informativo. Corichi, secretaria de la Comisión de Comunicaciones y Transportes del Senado, puso el dedo en la llaga y no descartó promover la comparecencia de algún funcionario para que explique esta mecánica. III La inesperada salida de Maximiliano Cortázar de la vocería de la Presidencia parece que no causó mella en Felipe Calderón, quien durante la inauguración de la Expo Guanajuato Bicentenario bromeó, estuvo pendiente de las exposiciones y pabellones sobre historia de México y el cambio climático y, desde primera fila, de frente al tenor Fernando Mora pidió las canciones de Mi ciudad y El rey. En tanto, Alejandra Sota, la nueva vocera de la Presidencia, no acompañó al mandatario en la gira sabatina.
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