En el círculo de estudios del Centro Histórico hoy estuvo Arnoldo Martínez Verduzco, para analizar las elecciones pasadas y las perspectivas para el 2012.
Martínez Verduzco dijo que no son lo mismo las elecciones para gobernador que las presidenciales.
Si alianzas con partidos de la derecha que tienen proyectos muy diferentes, son cuestionables, alianzas para elecciones presidenciales con estos partidos son inconcebibles, porque los programas son completamente distintos.
La oligarquía pretenderá utilizar los resultados en las elecciones pasadas para manejar la idea de que alianzas es igual a triunfo, y un candidato popular es igual a fracaso.
Nosotros tenemos que analizar estas elecciones para usarlas a nuestro favor, debemos analizar los resultados y más allá de las siglas, analizar los programas de gobierno.
La oligarquía sabe bien quién es el enemigo y han hecho todo lo que está a su alcance para perpetrarse en el poder, bajo las siglas que sean.
Saben que su proyecto ya es inviable y que no tiene posibilidades de recuperarse, por lo que han creado las condiciones que les permita seguir defendiendo los mismos intereses.
Presentarán otra cara, la de una alianza moderna que no permitirá que llegue el PRI. Pero el PAN es lo mismo que el PRI y quizá es hasta peor.
Para perpetrarse la oligarquía controla las instituciones relacionadas a las elecciones, controla el IFE, el Tribunal Electoral, el PRD y otras instituciones, como el IFAI o la COFETEL.
Ha sacado el ejército a las calles con permiso para asesinar, con pretexto de la guerra al narcotráfico, que ellos inventaron, para reprimir, en caso necesario.
Utilizarán todos los medios de comunicación posible para convencernos de que veamos las cosas como a ellos les conviene.
Tienen preparado un fraude cibernético e intentarán todo para impedir que un candidato popular, con un proyecto popular, como comprobadamente es Andrés Manuel López Obrador, llegue a ser candidato.
Lanzarán contra él campañas negras, campañas de odio, como en 2006, lo calumniarán y lo difamarán.
Pero el agotamiento de este régimen político también nos da la oportunidad de transformar verdaderamente al país. Tenemos que confrontarlos con todas nuestras fuerzas, tenemos que organizarnos y estar muy atentos porque intentarán confundirnos. Tenemos que mantenernos claros en que lo que importa son los proyectos, no las siglas, y que una alianza PRD - PAN sería un gran fracaso para la gran mayoría de los ciudadanos.
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