Que la conferencia de prensa de la Secretaría de la Función Pública casi “se revienta”, ante la negativa inicial de los funcionarios de dar a conocer el nombre de la persona involucrada en un fraude a Petróleos Mexicanos por 13 millones de dólares.
Finalmente, el secretario Salvador Vega Casillas tuvo que aceptar que se trataba de María Karen Miyasaki.
Vega Casillas lo tuvo que hacer por escrito, pues aseguró que por cuestiones jurídicas no podía “nombrarla”.
Que después de contarse y recontarse bien tras el Consejo Nacional, los representantes panistas, algunos felices y otros porque no les quedó de otra, aceptaron que la ganadora del fin de semana fue Josefina Vázquez Mota.
Mientras unos se pelean y otros acusan, Josefina teje. Y sigue tejiendo.
¿Dejarán avanzar a la coordinadora de los diputados panistas o ya estarán ideando cómo meterle el pie?
Que de nueva cuenta se verá si la Secretaría de Gobernación y el Gobierno del Distrito Federal se ponen del lado de los ciudadanos o los castigan, como de costumbre.
Como todos los meses de mayo, los maestros de la sección 22 han inventado una demanda y anuncian que hoy se instalarán en Bucareli, ya de por sí zona de caos por las obras del Metrobús.
Pretextos les sobrarán al secretario de Gobernación, Fernando Gómez Mont, y al jefe de Gobierno del Distrito Federal, Marcelo Ebrard, para cruzarse de brazos y mirar al infinito, mientras se estrangula y asfixia la vida de millones de personas.
¡Que se aguanten!
Que por fin el cardenal Norberto Rivera Carrera puso orden en la Catedral Metropolitana para que se respetaran los lugares designados a los medios de comunicación, y funcionara la bocina para que los reporteros pudieran grabar la homilía dominical.
Norberto, además, dejó en claro que el encargado de la relación con los medios informativos en la Arquidiócesis, y obviamente en la Catedral, es el padre Hugo Valdemar, el vocero que después de dos semanas de no pararse por ahí, ayer estuvo al pie del cañón.
¡Santo remedio!
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