Los rivales políticos del autodescartado presidenciable y secretario de Hacienda, Ernesto Cordero, tanto los que tiene en su partido azul como los de la oposición, se apresuraron a sumirlo en el pozo de la barbacoa como resultado de sus declaraciones sobre el milagroso poder multiplicador de 6 mil pesos. Hay que reconocer que tuvo el buen tino de rectificar. El tema debería servirnos para reflexionar, mas allá del golpeteo político o el sarcasmo. ¿Cuánto debe ganar un contribuyente mexicano para adquirir mediante financiamiento una vivienda, un automóvil y darse tiempo para enviar a los chicos a colegios privados? Obviamente 6 mil pesos serían insuficientes. Hay escuelas de las que enseñan inglés, alemán o japonés, cuyo costo mensual, incluidos los gastos de uniformes, útiles diversos y transporte, rebasan esa suma. En teoría constitucional el salario mínimo debería satisfacer aquellas necesidades. Sin embargo, el más alto apenas suma 1,795 pesos mensuales. Peor, imposible. Tendríamos que reincorporarle lo que ha perdido con la inflación de 1978 a la fecha, más la rapiña de las políticas neoliberales. Sorpréndanse: un obrero capitalino debería ganar hoy 6 mil 898 pesos cada mes. Muy cerca de los 6 mil que mencionó el secretario Cordero. Pero, además, en los 33 años transcurridos entre 1978 y el actual tendrían que haberse registrado algunos aumentos de sueldos por encima de la inflación. Quizá, entonces, el mínimo este día fluctuaría entre 10 mil y 12 mil pesos mensuales. Entonces sí, trabajando madre y padre, sería posible que una familia tuviera acceso a crédito bancario para la compra de un departamento y tal vez no sólo a uno sino a dos coches. Por otro lado, en ese imaginario país con justicia social necesariamente la educación pública sería de calidad, los colegios privados tendrían como clientela sólo a los pirrurris. Quizá sin proponérselo, el secretario de Hacienda nos hizo reflexionar nuevamente en la situación de desgracia que vive nuestro país. En esta página aparece un cuadro que muestra la pérdida de salario, elaborado por el economista Adolfo Álvarez Arratia.
@Vox Populi
Asunto: destrucción en la Ruta 4
Los habitantes de las colonias que rodean el tramo Los Remedios-San Lázaro de la Ruta 4 del Metro, somos los supuestos beneficiados por la obra, pero en realidad somos los afectados. Para construir esta ruta se pretende destruir el único espacio cultural con que cuentan las colonias circundantes: el Foro Cristina Payán. ¿Es lógico que una obra reciente en beneficio de la población, particularmente de los jóvenes, se pretenda destruir por cuestionables criterios? ¿Quién está apadrinando a ADO?, ya que también está involucrada en este proyecto. ¿Ésta es la forma adecuada de poner en marcha un proyecto por un gobernante supuestamente democrático y de izquierda?
R: ¿De izquierda? Primero definamos que es hoy la izquierda mexicana y en qué se diferencia de la derecha. Todos andan tras los billetes.
Asunto: indemnización a víctimas de la narcoguerra
Me pareció muy interesante la nota que publicaste ayer acerca de la indemnización de 10 millones de dólares que pagó Toyota en California a familiares de cuatro personas que perdieron la vida en un accidente atribuible a una falla del automóvil. Procede que en México el gobierno de Calderón indemnice a las familias de las víctimas inocentes de la matanza que está consumando a la vista de todos, con eso de la narcoguerra. Es más, Enrique, como sé que eres abogado, propongo que tú seas el representante de las familias en las demandas para obtener las indemnizaciones.
Ángeles García/Puebla
R: Es una iniciativa audaz exigir una reparación económica aunque, si he de ser realista, tiene pocas probabilidades de llegar a buen fin. Ya lo vimos con la guardería ABC, de Hermosillo: el asunto subió hasta la Suprema Corte de Justicia sin resultados. Te agradezco que me propongas para llevar el caso –o millares de casos–, pero debo decirte que hace 15 años descolgué de la pared mi título de abogado expedido por la Facultad de Derecho de la UNAM. Sin embargo, apoyo la iniciativa en mi calidad de periodista.
Asunto: misteriosa denunciadora
Leí en tu columna el caso del asalto a los pasajeros que viajaban en el autobús de la línea Primera Plus, que salió de Querétaro el sábado 12 de febrero con destino al aeropuerto del Distrito Federal. El pasado viernes 18, a las 7 p.m., yo abordé en Querétaro el autobús de súper lujo de la línea ETN Turistar, con destino a la terminal Tasqueña del Distrito Federal. En la misma forma como fueron asaltados los pasajeros el sábado 12, fuimos atracados con lujo de violencia por dos individuos armados que se subieron como pasajeros. ¿No crees que si un autobús, también saliendo de Querétaro, fue asaltado unos días antes, podrían haber puesto los encargados de estas líneas camioneras medidas de seguridad y checado a los pasajeros que abordaban el autobús? Parecería que son cómplices de los bandoleros.
Otra misteriosa denunciadora
R: Me decían algunas personas que los pasajeros están siendo filmados antes de abordar. Por tanto, las autoridades cuentan con las imágenes de los asaltantes. Si quisieran detenerlos ya lo hubieran hecho. Tu sospechosismo es acertado.
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