Que la próxima semana, el jefe de Gobierno del Distrito Federal, Marcelo Ebrard, será por un momento un legionario más de la Chica material cuando corte el listón inaugural del Hard Candy Fitness, un negocio de Madonna, quien hizo la invitación personal al mandatario capitalino con quien, se dice, comparte “políticas liberales”.
Se espera que la Reina del pop dé una clase de baile para poner en marcha el gimansio, en Bosque de Las Lomas, donde organizará una gran fiesta.
¿Se instalará algún alcoholímetro en los alrededores? No, cómo, sería una descortesía con las visitas.
Que hablando de pachangas, a unos días de contraer nupcias, el gobernador del Estado de México, Enrique Peña Nieto, prefirió dar por terminada una entrevista en Los Pinos cuando se le preguntó si ya estaba listo para el sábado. Se dice que sólo habrá 200 invitados y que el vestido de la novia es del diseñador Macario Jiménez.
Que el presidente Felipe Calderón hizo pública una peculiar afición de su esposa, Margarita Zavala, quien echó ayer el volado inicial en el juego por el Día de Acción de Gracias estadunidense entre los Jets de Nueva York, donde juega el mariscal de campo Mark Sánchez, y los Bengalíes de Cincinnati: “Y eso que no le dejaron tirar un pase, porque le encanta el futbol americano”.
Que antes de la conferencia que ofreció para defenderse de las acusaciones en su contra, la ex gobernadora zacatecana Amalia García pidió a los mandos del PRD Jesús Ortega y Carlos Navarrete acelerar la expulsión del senador Tomás Torres, a quien se atribuye haber operado a favor del PRI en las pasadas elecciones estatales.
Y la respuesta fue inmediata: el cese, fulminante.
Que quien hizo corajes de más fue la ministra Olga Sánchez Cordero, ayer en la Secretaría de Gobernación, por el retraso de 15 minutos que llevaba el inicio del acto conmemorativo del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, al grado que estuvo a punto de retirarse sin tomar la palabra, pero funcionarios de la dependencia encabezada por Francisco Blake se apresuraron y el asunto no pasó a mayores.
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