Que el gobernador electo de Oaxaca, Gabino Cué, fumó ayer la pipa de la paz con el priismo de la entidad, cuyos diputados federales, encabezados por Héctor Pablo Ramírez, ofrecieron cerrar el capítulo de la elección del 4 de julio y apoyar la reasignación de recursos del presupuesto 2011 a la entidad.
Como “testigo de honor” estuvo el líder parlamentario del PRI en San Lázaro, Francisco Rojas.
¿Y a cambio de qué?
Que el presidente Calderón confesó que cuando se diseñó el Centro de Inteligencia de la Policía Federal recordó la serie televisiva 24, protagonizada por Kiefer Sutherland en el papel de Jack Bauer, y dijo: “Yo quiero todos los juguetes de ese señor; ahí vamos”.
Que apoyada no sólo por el secretario del Trabajo, Javier Lozano, la llamada ley Beltrones para el primer empleo sumó el respaldo de los diputados federales del Partido Acción Nacional.
“Se buscan empresarios que den chamba, ofrecemos estímulos fiscales”, se puede leer en un anuncio espectacular colocado en Periférico y Lomas Verdes.
El espectacular está firmado por www.diputadospan.org
Beltrones debe estar de plácemes.
Que con notable timing político, la Asociación de Ex Alumnos del Instituto Tecnológico Autónomo de México entregará hoy el Premio al Mérito Profesional a dos egresados con, por lo menos, 15 destacados años en los sectores público, privado, social o académico.
Recibirán el premio dos de los más fuertes precandidatos a reemplazar a Marcelo Ebrard y Enrique Peña Nieto: Mario Delgado y Luis Videgaray, respectivamente.
Que Gerardo Fernández Noroña tiene “base social” en Naucalpan. Al menos eso se vio el domingo en un mitin de Andrés Manuel López Obrador, donde la gente le exigió al tabasqueño que agradeciera la presencia del polémico diputado del Partido del Trabajo.
“¡No-ro-ña, No-ro-ña!”, gritaban, cuando López Obrador, molesto, dijo que sólo lo había acompañado en tres ocasiones en las giras por el Estado de México, lo que no fue suficiente para el público.
“Está bien”, dijo López Obrador: “A Noroña lo queremos mucho”.
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