Las redes sociales están conformadas, en su mayoría, por las y los jóvenes de clase media. Nunca hemos dudado del poder de internet en la creación de la opinión pública, pero quizá muchas veces lo subestimamos, solo basta preguntarle a los pre candidatos presidenciales. Pero lo que deseo profundizar es en el efecto o la importancia de la clase media en la contienda presidencial.
La batalla por la clase media será fundamental en este año que apenas comienza. Me desvío un poco solo para desearles un feliz año. Los candidatos están conscientes de que no se puede ganar si se está peleado con el sector económico de clase media, y lo vemos claramente en Andrés Manuel y su profundo interés por llegarle a la clase social que marcó la diferencia en 2006.
En las elecciones del 2006, la clase media vivió una especie de referéndum: AMLO sí, AMLO no. Pero he aquí donde se retoma la importancia de las redes sociales que mencioné al iniciar, ahora la web nos permite informarnos de una forma libre y sin monopolios informativos. Esto puede representar una clara ventaja (y lo está siendo) para el pre candidato de la izquierda en México.
Claro, las redes sociales e internet muestran su simpatía a Andrés Manuel con miles de comentarios positivos, trending topics y hasta dándole ventaja en encuestas en línea, como prueba les dejo la página www.elmenospeor.com donde vemos a AMLO con casi 58% de las preferencias. Lo que más sorprende no es ese dato, sorprende ver a Peña Nieto en un distante tercer lugar con apenas el 13%.
Ante lo visto solo se puede deducir una cosa: Enrique Peña Nieto está perdiendo estrepitosamente a la clase media. Es obvio, las principales mofas hacia Peña son hechas por la clase media, la que domina la web y las redes sociales. Esto nos lleva a deducir que la clase media será una batalla que seguramente ganarán López o el que resulte elegido en Acción Nacional.
Considero que el PAN tendría más posibilidades de dominar la clase media y alta si es Ernesto Cordero el elegido, porque ante una sociedad que todavía guarda, si no machismo, una desconfianza enorme hacia las mujeres, independientemente de la capacidad de la candidata.
Cordero podría atraer a jóvenes votantes que se dejen seducir por su preparación académica, esto porque es a lo que muchos jóvenes de dicha clase aspiran.
Si en internet Peña Nieto ha sido destrozado, ¿dónde están sus simpatizantes? Los vimos en el Estadio Kukulcán de Mérida, miles de acarreados llenaron el recinto ante la promesa de “música y comida” como lo dijera Reforma. He ahí la maquinaria del PRI, traficar con el hambre, la inseguridad y pobreza de la gente más pobre.
El discurso bajado de volumen que ahora pronuncia Andrés Manuel López Obrador parece estar dando resultados, sus percepciones negativas están cayendo de forma constante y de capitalizarlo correctamente lo podríamos ver con un apoyo de la clase media que seguramente hace 1 año jamás hubiéramos imaginado. Está en él, la clase media le pudo haber dado el 40% que necesitaba en 2006 para conseguir claramente el triunfo.
El PAN sigue a la esperanza de que la clase media le dé el triunfo, lo más probable es que utilicen el mismo discurso que utilizaron en el 2006, ese donde decían que apostarle a algo distinto era un peligro. Esta estrategia puede tener un resultado inverso, y es que a los tuiteros no se les escapa nada, si no pregúntenle a Josefina y su hashtag #MeMaquilloComoJosefina.
La disputa por la clase media será entre todos los candidatos, pero dos son los que tendrán una verdadera posibilidad de apropiarse de la simpatía de ese sector. En Twitter quizá no todos sepan cuánto cuesta el kilo de tortillas, lo más probable es que la mayoría de los mexicanos no hablemos un inglés perfecto, y por supuesto que no todos podrían citar 3 libros, pero en Twitter todo se pitorrea, y como le diría algún tuitero por ahí a Enrique Peña Nieto: “Tú quieres ser Presidente, yo no”.
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