En la colonia Morelos, y específicamente en el barrio de Tepito, algunos ciudadanos están muy preocupados. Dicen que algo extraño está sucediendo, algo mucho más grave de lo que las autoridades han informado. Resulta que el viernes, otros dos adolescentes —de 17 años— fueron baleados y sólo uno logró sobrevivir. Una jovencita perdió la vida. La tragedia se debe sumar a la de los siete jóvenes que fueron acribillados y de los cuales seis perdieron la vida días antes. El procurador capitalino se refirió al hecho como la agresión contra dos adictos a los solventes. Fueron baleados con AK-47. Vecinos aseguran que hay mar de fondo, ya que en el lugar del último incidente se encontraron cartulinas con una especie de narcomensajes. Las firman Los Colombianos, y dicen que el asunto es sólo la punta del iceberg. Con el referente del acelerado proceso de descomposición en otras partes del país, generado por choques entre bandas rivales del hampa, aparentemente los ciudadanos de la Morelos tienen razones para estar preocupados.
Ayer corrió con insistencia la especie de que, ahora sí, Martí Batres dejaría la Secretaría de Desarrollo Social del GDF. Incluso se llegó a afirmar que hoy sería el último día del funcionario a cargo de una de las oficinas con mayor presupuesto. Los enterados de cómo se mueven las cosas tras bambalinas en el gobierno capitalino, aseguran que la presencia de Batres resulta ya insostenible. Nadie se atrevió, sin embargo, a señalar la abierta cercanía del funcionario con Andrés Manuel López Obrador como la razón de que resulte “insostenible”. La Secretaría de Desarrollo Social era la cartera más poderosa en términos financieros durante la administración de AMLO. Con la llegada de Ebrard, ésta sufrió recortes significativos, ya que los programas de adultos mayores, apoyo a madres solteras y atención a personas con discapacidad fueron canalizados a la Red Ángel. Algunos vieron en ese movimiento una forma de restarle poder a un funcionario que llegó con el sambenito de ser una imposición, una suerte de cuota impuesta con el anterior jefe del GDF. Hoy podremos atestiguar la veracidad de la especie.
Luego de la encerrona con el presidente Felipe Calderón Hinojosa, los cinco aspirantes a dirigir el CEN de Acción Nacional se manifestaron comprometidos con el juego limpio e incluso anunciaron que, por acuerdo, limitarían sus expresiones públicas. Pero los hechos apuntan a que al menos uno de los equipos no está dispuesto a dejar que las aguas fluyan con tranquilidad. Ayer se “filtró” un dato que golpea directamente al diputado Roberto Gil Zuarth. La cuestión es que en la página web que lanzó como aspirante a dirigir al blanquiazul, aparece que cursó los estudios de doctorado en la Universidad Carlos III y distintos diplomados en el centro de Estudios Políticos y Constitucionales, en Madrid, España. Los interesados en poner piedritas en el camino del ex subsecretario de Gobernación recuerdan que hace un par de meses Gil Zuarth negó cualquier responsabilidad en el hecho de su hoja de vida, que consignaba un doctorado en Derecho sin contar con el título, es decir, sin haber concluido todo el trámite. De ese tamaño es el “fuego amigo”.
Apunte final: El presidente Calderón tuiteó ayer: “Esta mañana me llamó el presidente Obama para felicitar a México por el abatimiento de Tony Tormenta, líder del cártel del Golfo”. Se vale.
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