El aliancista Manuel Camacho Solís declaró que la posible candidatura de Alejandro Encinas para gobernar el Estado de México resultaría preocupante para Peña Nieto, pues Encinas representa una verdadera competencia en la entidad.
Lo dijo porque en realidad es cierto, sin embargo, para los que conocemos un poco a Camacho no podemos confiar en ninguna de sus declaraciones pues, debajo de la mesa, hace arreglos y negociaciones hasta con el mismo diablo.
Para Camacho, y el grupo a quien verdaderamente representa, es un golpe tremendo que Alejandro Encinas vaya sólo y deje colgado al PAN. Así que en estos días que inicia la gira de Andrés Manuel por el Estado de México, Camacho trabajará a marchas forzadas para promover la alianza con el PAN, argumentando que es necesaria para asegurar la salida del PRI.
Por su parte, Marcelo Ebrard se encargó del destape de Encinas, pero al decir que confía en que Andrés Manuel apoye a Alejandro Encinas queda la duda si realmente enterrará la posibilidad de la alianza panista que promovió a fines del año pasado.
Todo está en el aire hasta que no se ratifique que Encinas irá libre de alianzas con la derecha destructora.
Hay una propuesta oscura por ahí de realizar una encuesta en el PRD para definir si es viable que se acabe con la alianza camachista, eso me huele a una jugada sucia de parte de los actuales dirigentes del PRD, que resultaron más calderonistas que de izquierda. En fin.
La suerte está echada y hay que esperar el desenlace.
Aunque nadie desea una traición más, puede suceder y para eso hay que estar preparados. De cualquier forma el Movimiento por la Transformación del País seguirá adelante, ya no lo van a detener por más acciones contrarias a la voluntad de las bases y sus simpatizantes.
La situación en la que se encuentra el pueblo empobrecido no da para lamentaciones, tenemos que actuar y no perder de vista el objetivo: detener la voracidad de los que se han apoderado de México y sus instituciones y, lo más importante, acabar con la corrupción y con la impunidad para que pueda existir igualdad y justicia.
No nos van a robar el derecho a la esperanza, y mientras haya esperanza habrá lucha pacífica y camino trazado para seguir adelante. ¡Viva Obrador!
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